1. MAQUILLAJE

 RESEÑA HISTÓRICA DEL MAQUILLAJE.

    Antiguo Egipto:

Las mujeres egipcias resaltaban sobre todo los ojos que maquillaban con colores fuertes, los párpados los pintaban con colores vivos que obtenían a base de mezclar tierra, cenizas y tinta.

Recientemente se han descubierto en las tumbas de los faraones restos del maquillaje que utilizaban para el rostro y asombrosamente, los estudiosos revelan que esos productos cosméticos no son tan diferentes a los que se usan hoy en día.

Fueron también las egipcias las que iniciaron la moda de pintarse los labios, lo que hacían con un tinte hecho de ocre rojo y óxido de hierro natural que extendían con un cepillo o un palito.

Grecia y Roma :

Pasando por Grecia y Roma, el maquillaje se perfecciona y empieza a cobrar importancia también la piel, que se intenta blanquear con una mezcla hecha a base de yeso, harina de habas, tiza y albayalde (carbonato clásico de plomo), que al final obtenía resultados totalmente contrarios a los pretendidos, ya que al contacto con el sol oscurecía el rostro.

Asimismo, las pestañas se ennegrecían utilizando una mezcla de huevos de hormigas y moscas machacadas

 Corte de Francia

 El verdadero apogeo del maquillaje lo encontramos en la corte de Francia, donde se blanqueaban las caras con polvos y una crema nacarada brillante a base de azufre que había provocado envenenamientos mortales.

En los inicios del siglo XIX, surge el primer intento de eliminar las arrugas a base de un invento mortificador al que llamaban el "esmaltado de la cara" que consistía en lavar primero la cara con un líquido alcalino, después se extendía una pasta para rellenar las arrugas y encima se colocaba una capa de esmalte hecha con arsénico y plomo, la cual duraba aproximadamente un año.

Si la máscara era muy gruesa se agrietaba al menor movimiento y desde luego, era de lo más insano e incómodo de llevar.

El origen del término maquillaje se debe en sentido etimológico a “Maquillaje” (pintura del rostro de los actores de teatro en el siglo XIX en Francia). Sin embargo, su historia ha ido evolucionando a lo largo del tiempo hasta llegar a categorías tan avanzadas como lo que hoy conocemos como opto cosmética. 

. Edad Media y Renacimiento

En la Edad Media, cualquier arreglo personal femenino estaba mal considerado a no ser que fuera el cabello; las damas medievales llevaban el cabello larguísimo y, recluidas en sus castillos, esperaban las visitas de mercaderes ambulantes para comprar bálsamos, artículos de tocador y hierbas. Sin embargo, el cuidado personal pasaba a ser considerado indigno y ofensivo.

En el Renacimiento en cambio el maquillaje sufre una transformación: se convierte en un elemento clave de la época. Las mujeres nobles tenían como ideal un cuerpo con formas curvadas, cabello rubio, la frente alta y despejada con muy pocas cejas y la piel muy blanquecina. Las cejas se dejan muy finas y en algunos casos desaparecen. Incluso la frente se depila para dejar más dimensión en el rostro. Los ojos se maquillan con khöl y el colorete tiende a granate.

 Siglos XVII – XVIII

La gran obsesión por el maquillaje durante esa época se debe en parte a la extravagancia y exageración propuesta por la corte. Ambos, hombre y mujer, se maquillaban. Unos adquiriendo un aspecto incluso afeminado y otras empolvándose el rostro con polvo de arroz o de harina, marcando sus mejillas de rojo estridente, perfilándose las cejas y delineando sus ojos en negro, aplicándose azul o verde en los párpados y rojo oscuro en los labios dibujados en forma de corazón.

 Japón

Si hablamos de maquillaje en Japón no podemos pasar por alto a las Geishas muy comunes entre los siglos S.XVIII-XIX si bien existen en la actualidad. Tenían un distintivo maquillaje para potenciar sus rasgos con cierta insinuación. Su maquillaje blanco cubría rostro, cuello, pecho y manos, con dos o tres áreas sin pintar (formando una “W” o “V”) cerca de la nuca, para acentuar esta zona erótica, y una zona

Descubierta de piel alrededor del pelo, que crea la ilusión de una máscara. Los ojos y las cejas eran remarcados con carbón. Las maiko (aprendiz de Geisha) además usaban rojo alrededor de los ojos. Los labios eran pintados con una brocha pequeña simulando un contorno de labios sensual en forma de corazón por arriba y muy redondo.

. Siglo XIX

Había una tremenda obsesión por aparecer enferma, intentaban conseguir una tez pálida o blanquecina, las orejas se marcaban de azul, las mejillas se empolvaban de rosa pálido y los labios en un color carmesí.

 Siglo XX

La industria cosmética ofrece un gran abanico de posibilidades en productos de peluquería y cosmética. A raíz del desarrollo del cine se crean cánones de belleza y cosmética que todas las mujeres aspiran a conseguir. Las actrices jugarán un papel muy importante en el maquillaje, el peinado y la estética con el paso de las décadas y su estilo será el más imitado.

 Época actual

En la actualidad, el maquillaje se ha convertido en un elemento para embellecer los rasgos que cada mujer estima oportuno.

Cualquiera que sea tu color de piel –blanca, negra, morena o asiática- es importante que sepas como realzarla. Las mujeres son únicas, por tanto sus rutinas de belleza y maquillaje deben enfocarse en las necesidades principales –manchas solares, cejas escasas, ojos verdes, etc. Identificar lo que te conviene es muy sencillo: concéntrate en el subtnono de tu piel y rasgos más prominentes -a partir de allí, podrás destacar tu rostro con los colores adecuados.

   TIPOS DE MAQUILLAJE:

. Maquillaje para pieles blancas

Las pieles claras se caracterizan por sensibilidad al frio o calor extremo, además de ser más vulnerables a los rayos solares, maquillaje vencido y contaminación. Nunca olvides los protectores solares al salir de casa o al ir a la playa y aplica tratamientos específicos constantemente. En cuanto al maquillaje, toma en cuenta el color de tus ojos y de cabello al momento de maquillar; presta atención al subtono de tu piel -amarillo, rosa, azul- y asegúrate de el labial que escojas no haga lucir tus dientes amarillentos –un efecto visual muy común por la palidez de la piel.

 Maquillaje para pieles morenas

Las pieles latinas son identificables por su tono canela –muchas veces con subtonos olivas o amarillentos- y con tendencia a irse "apagando" a través de los años. Para solucionarlo, necesitas un hidratante facial y/o protector solar que mantenga tu piel suave en el invierno y productos que le devuelvan la luz a tu rostro. Al ser tu piel natural o artificialmente bronceada, debes recurrir a tonos que resalten y que no se pierdan en tu tez -¿tu objetivo? Un maquillaje luminoso. Presta atención si tu piel es grasosa pues un bronceado sin sol acentuará el problema

. Maquillaje para pieles negras

Las pieles oscuras, aunque se identifican por ser resistentes al sol, no deben dejar a un lado los protectores solares. Puedes ser propensa a espinillas, puntos negros y manchas oscuras -soluciónalo con una mascarilla o exfoliante profundo. Tienes la ventaja de usar tonos vivos en el maquillaje sin llegar a verse exagerado, de hecho, tu maquillaje resultará único. Sin embargo, todo va a depender de tus rasgos físicos o país de origen pues no todas las pieles negras son iguales -éstas podrán definirse en subtonos oliva, rojizo, marrón y amarillo, de acuerdo a tu etnia o descendencia.

3.     PROTOCOLO DE MAQUILLAJE:

En primer lugar quiero explicar que originariamente el maquillaje es un recurso esencial para las mujeres de ciertos sectores empresariales que han de mostrar una imagen cuidada y elegante. El maquillaje ha de ser siempre discreto y natural. No obstante, independientemente de cuál sea nuestro ámbito laboral, jamás iremos a trabajar con la cara como si acabáramos de salir de la cama.

. RECOMENDACIONES:

 El maquillaje debe armonizar con el tono de la ropa.

·   No debe ser más oscuro que nuestra piel. Es un error pensar que va a dar un aspecto bronceado. Nos hará parecer mayores, acentúa los surcos y las arrugas de la cara.

·       El tono adecuado es aquel que no forma una línea visible entre la cara y el cuello.

·     Maquillaje se prueba en la barbilla y se extiende hacia la mandíbula. NO SE PRUEBA EN LA MUÑECA O MANO.

·       En barra o fluido, depende de la piel, si es grasa la barra la engrasa más.

·     Los tonos nacarados de las barras de labios producen sensación de envejecimiento y las naranjas amarillean los dientes, los tonos rojos, rosas y burdeos los blanquean; los colores claros agrandan los labios, los oscuros los hacen parecer más finos.

·       Si tienes los labios finos perfila el contorno por el borde exterior que marca la línea natural de los labios (poner brillo en el centro). Si los tienes demasiado grandes se perfila por el borde interior. Los tonos oscuros o mates les quitan protagonismo.

·       Cuidado con los polvos algún cutis los cuartean.

·       Colorete: se aplica en los pómulos. Más oscuro en la mejilla y más claro en el pómulo.

·       El cutis puede tender a verde, rosa o azulado. Hay que corregir estas tonalidades.

·    Las rayas horizontales hacen que la gente parezca más gorda. Por eso a la gente con la cara alargada le favorece por que se contrarresta. Las caras alargadas se pueden corregir con flequillos para las mujeres y con bigotes para los hombres. A una cara alargada no le favorecen los pendientes largos.

3 Formas de la cara: Correcciones

·       Triangular: suaviza la barbilla con un toque de sombra oscura en su punta. Oscurecer las sienes para compensar la forma del rostro. Un flequillo largo compensa y suaviza la parte de la frente. Cuidado con el escote en pico porque repite la forma del rostro.

·       Rectangular: el objetivo es acortar y suavizar el ángulo de la mandíbula, aplicar sombra más oscura en este punto. Peinado: crear volúmenes a la altura de las mandíbulas y las sienes pares camuflar y suavizar los ángulos. Cortes a capas y moldeados suaves. Flequillo despuntado o de lado. Cuidado con el escote en forma cuadrada.

·       Cuadrada: rostro igual de ancho que de largo, ángulo de la mandíbula marcado, al igual que la rectangular, pero en este caso la frente es más corta. Sombrear los lados de la cara y la mandíbula. Peinado: añadir altura y cubrir la parte ancha de la cara.

·       Alargada: objetivo, hacer que la cara parezca más ancha y más corta. Tono de colorete claro y luminoso, con toques de polvos más oscuros en la frente y en la punta de la barbilla. La forma de las cejas más horizontal que arqueada. Peinado: volumen a los lados, lo que acorta y ensancha la forma del rostro. El flequillo completo también es una buena opción. Cuidado con la raya en medio en el caso de que no se lleve flequillo. Evita los escotes en pico, si a los horizontales.

Maquillaje para hombres:

·         Rostro: A pesar de no tener que usar maquillaje para corregir ciertas imperfecciones, a cambio de eso, deben prestar especial atención a tener el cabello prolijamente cortado y peinado, el rostro afeitado o bien mantener una barba cuidada. Por otro lado, cada vez se encuentra mayor oferta de cremas y lociones destinadas al público masculino que pueden utilizar para mejorar líneas de expresión, pieles resecas, etc.

·         Manos: Las manos de un hombre hablan por sí mismas; tener las cutículas corridas y las uñas cortas con una buena terminación es importante. Para los que quieran, pueden agregarle algún esmalte transparente.

·         Traje: Procura comprar uno de buena calidad, es notable la diferencia y lo podrás usar por muchos años, es un clásico. Debes fijarte que el corte del mismo te calce perfecto. O bien, si sólo hay pequeñas cosas a corregir, lo podes enviar al sastre. Elegí el color que mejor vaya con tu rostro para que lo ilumine y no realce imperfecciones, en este sentido un elemento que también te puede ayudar es la corbata. El botón del saco que se abotona es el primero. Y por supuesto, el pantalón siempre va con cinturón (que éste sea del mismo color que los zapatos).

·         Medias: Es desagradable cuando al sentarse asoman medias que nada tienen que ver con nuestra vestimenta, sobre todo si son deportivas! Las medias son otro detalle que no hay que relegar. Usa las que combinen con tu traje y sean de materiales finos.

·         El detalle: Es el perfume! No te puede faltar, hace la diferencia.